Las guías internacionales para el manejo de la hipertensión arterial proporcionan recomendaciones basadas en la evidencia para el diagnóstico, tratamiento y monitoreo de la hipertensión en adultos. Las principales guías incluyen las de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) y la Sociedad Europea de Hipertensión (ESH), la American College of Cardiology (ACC) y la American Heart Association (AHA), además de la Organización Mundial de la Salud (OMS). A continuación, se presentan los puntos clave de estas guías.
1. Diagnóstico y Clasificación de la Hipertensión
- ESC/ESH (2018):
- Tensión Arterial Optima: <120/80 mmHg.
- Normal: 120-129/80-84 mmHg.
- Normal-alta: 130-139/85-89 mmHg.
- Hipertensión grado 1: 140-159/90-99 mmHg.
- Hipertensión grado 2: 160-179/100-109 mmHg.
- Hipertensión grado 3: ≥180/110 mmHg.
- Hipertensión sistólica aislada: Presión sistólica ≥140 mmHg y diastólica <90 mmHg.
- ACC/AHA (2017):
- Normal: <120/80 mmHg.
- Elevada: 120-129/<80 mmHg.
- Hipertensión etapa 1: 130-139/80-89 mmHg.
- Hipertensión etapa 2: ≥140/90 mmHg.
- OMS (2021):
- La OMS utiliza puntos de corte similares a los de la ESC/ESH para clasificar los niveles de presión arterial, haciendo hincapié en la adaptación a contextos de bajos recursos y el uso de monitores validados para la medición.
2. Métodos de Medición
- Medición en el consultorio: Las guías recomiendan al menos dos mediciones en dos o más consultas para confirmar el diagnóstico.
- Monitoreo Ambulatorio de la Presión Arterial (MAPA) y Monitoreo Domiciliario de la Presión Arterial (MDPA): Estos métodos son importantes para detectar la hipertensión de bata blanca y la hipertensión enmascarada.
- Estándares de Medición: Todas las guías enfatizan el uso de dispositivos validados y una técnica adecuada de medición para evitar errores.
3. Objetivos de Presión Arterial
- ESC/ESH:
- General: Reducir a <140/90 mmHg inicialmente y, en la mayoría de los pacientes, a <130/80 mmHg si es tolerable.
- Pacientes mayores (>65 años): Meta de 130-139/70-79 mmHg, evitando presión arterial sistólica <120 mmHg.
- ACC/AHA:
- Objetivo general: <130/80 mmHg en la mayoría de los pacientes adultos, incluidos aquellos con alto riesgo cardiovascular.
- OMS:
- Recomienda un enfoque más flexible, priorizando la reducción de al menos 20 mmHg en presión sistólica y 10 mmHg en diastólica desde el nivel de base en contextos de bajos recursos, buscando llegar idealmente a <140/90 mmHg.
4. Modificaciones del Estilo de Vida
Todas las guías concuerdan en la importancia de implementar cambios en el estilo de vida antes de iniciar el tratamiento farmacológico o junto con él, tales como:
- Dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension): Rica en frutas, vegetales, granos enteros y baja en sodio.
- Reducción de sodio: Limitar la ingesta de sodio a <2 g al día (5 g de sal).
- Aumento de la actividad física: Al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada por semana.
- Reducción de peso: En pacientes con sobrepeso u obesidad, perder entre 5-10% del peso corporal inicial mejora el control de la presión arterial.
- Reducción del consumo de alcohol y cesación del tabaquismo.
5. Tratamiento Farmacológico
- ESC/ESH:
- Terapia de combinación inicial (doble) en la mayoría de los pacientes, generalmente con un inhibidor de la ECA o bloqueador de los receptores de angiotensina (ARA-II) combinado con un calcioantagonista o diurético.
- Terapia de triple combinación en casos de hipertensión no controlada.
- Agregar un medicamento adicional (como un beta-bloqueador) si la presión sigue sin control.
- ACC/AHA:
- Iniciar con monoterapia en hipertensión etapa 1 sin complicaciones. En hipertensión etapa 2 o en pacientes de alto riesgo, considerar terapia combinada.
- El tratamiento inicial puede incluir un diurético tiazídico, un IECA, un ARA-II o un calcioantagonista.
- OMS:
- En entornos de bajos recursos, recomienda IECA, ARA-II, calcioantagonistas o diuréticos tiazídicos como opciones de primera línea. Sugiere terapia combinada inicial en la mayoría de los pacientes, siempre que sea posible.
6. Manejo de Comorbilidades
- Diabetes Mellitus:
- Las guías recomiendan un objetivo de presión arterial de <130/80 mmHg en pacientes diabéticos, con fármacos de primera línea que incluyan IECA o ARA-II, debido a sus efectos protectores renales.
- Enfermedad Cardiovascular:
- En pacientes con enfermedad coronaria, se prefieren beta-bloqueadores y antagonistas de calcio. Los IECA o ARA-II también son beneficiosos en pacientes con insuficiencia cardíaca.
- Enfermedad Renal Crónica:
- Los IECA o ARA-II son recomendados en pacientes con proteinuria para proteger la función renal.
7. Manejo de la Hipertensión Resistente
- Todas las guías recomiendan confirmar la adherencia al tratamiento y la ausencia de hipertensión de bata blanca en estos pacientes.
- Si la hipertensión persiste a pesar del uso de tres fármacos, se puede añadir un antagonista de la aldosterona (espironolactona) o cambiar a otras combinaciones farmacológicas bajo supervisión especializada.
8. Seguimiento y Monitoreo
- Frecuencia de las citas:
- Para pacientes con hipertensión no controlada: Cada 1-2 meses hasta alcanzar el control.
- Para pacientes con hipertensión controlada: Cada 3-6 meses, con monitoreo adicional si existen comorbilidades.
- Evaluación de Efectos Secundarios:
- Monitorear efectos secundarios relacionados con los medicamentos antihipertensivos, incluyendo hipokalemia, hiponatremia y otros desequilibrios electrolíticos, especialmente en pacientes mayores.
Conclusión
Las guías internacionales para el manejo de la hipertensión enfatizan la importancia de la identificación temprana y el manejo integral que incluye cambios en el estilo de vida y un enfoque terapéutico individualizado. El tratamiento debe ajustarse según el perfil de riesgo del paciente, sus comorbilidades y las preferencias terapéuticas de cada sistema de salud.